-Gracias Muchachas por Todo-

-----Quiero hacer una pequeña pausa antes de proseguir y me voy a referir a las mujeres en Guantánamo Bay.

-----Para ellas el camino fué bastante más dificil que para nosotros, su condición de mujer y la supuesta debilidad del sexo bello se puso a pruebas en aquellos campamentos tremendos de la base naval de Guantánamo. Recuerdo los primeros días en aquel campamento Uniforme que tenía cerca de 4 mil personas y nos llevaban agua de madrugada solo para 3 mil, recuerdo que cada día, luego de la pateadura frente a la pipa de agua; la que fué mi esposa debía de bañarse a escondidas de la mirada ajena entre un rústico baño plástico y mi toalla que le servía de cortina y yo de cortinero. Recuerdo a la buena de Amarilis, esposa de mi amigo Carlos Milián luchar con sus dos hijitas, una de ellas de meses, muchas veces mi ex se encargaba de cuidar la niña para que Amarilis pudiese bañarse ó sencillamente ir al baño plástico, un ejemplo, un monumento a la puercada de lo sucios que estaban.

-----Recuerdo a Miriam y a Mirita, madre media tonta e hija tonta y media, hacían una pareja perfecta y que de tontas no tenían mucho, pués con su " comedera de mierda " salieron de Guantánamo primero que todos nosotros, a Mercedes Pedroso y su simpático hijo, Vadim Sampedro, ella siempre detrás de él y el chiquillo jorobando por todo el campamento. Hasta ahora todas mujeres buenas y verdaderos sostenes de sus esposos; pero también las hubieron que eran del carajo, la verdadera " Pata del Diablo " y el primer caso fué la esposa de un predicador fanático de una secta cristiana, un día después de haber predicado la palabra por medio campamento se dio cuenta que ella también practicaba la " caridad " con los necesitados del mismo campamento, bendita ella, la pobre.

-----Recuerdo a " Ayuda Humanitaria ", le decían así porque según ella no podía ver sufrir a los hombres y estos -llenos de dolor- le hacían cola en uno de los baños plásticos del campamento, la caritativa mujer fué al fin deportada a Cuba donde seguro estoy que continua con su obra de ayuda desinteresada.

-----Recuerdo a " La Guagua ", así le pusieron los hijos de puta de mi cabaña a una novia que tuvo Osiris, otro de nuestros camaradas de martirio, no recuerdo por qué le llamaban así, pero me la juego que era por el " ruido " intimo de la señora.

-----En fin, de todo hubo y mucho más que irá apareciendo más adelante; pero quería parar un momentito aquí, porque las mujeres en Guantánamo sufrieron doble, por ellas y por servir de psicólogas de sus maridos e hijos, a todas ellas un cariñoso recuerdo y darle sinceramente las GRACIAS por acompañarnos en este " Vía Crucis " .